• Los orígenes chamánicos de Santa Claus


Por Dana Larsen  ::  www.erocx1.blogspot.com.es  ::  Traducido por Marianna

Aunque la mayoría de la gente ve la Navidad como una fiesta cristiana, gran parte de los símbolos e iconos que asociamos con estas celebraciones derivan en realidad de las tradiciones chamánicas de los pueblos tribales de pre-cristianos del norte de Europa. La planta sagrada de estos pueblos fue la seta roja y blanca llamada "Amanita Muscaria." Estas setas ahora se ecuentran con frecuencia en los libros de cuentos de hadas y, por lo general, se asocian con la magia. Esto es debido a que contienen potentes compuestos alucinógenos y fueron utilizadas por los pueblos antiguos para alcanzar experiencias trascendentes. La mayor parte de los elementos de la celebración de la Navidad moderna, como Santa Claus, los árboles de Navidad, el reno mágico y la entrega de regalos, se basan inicialmente en estas tradiciones vinculadas a la cosecha y al consumo de estas setas consideradas sagradas.

El Árbol del Mundo
Estos antiguos pueblos, incluidos los Lapones de la actual Finlandia y las tribus Koyak de las estepas rusas centrales, creían en la idea de un árbol del mundo, considerado como una especie de eje cósmico, en el que los planos del universo eran planos fijos. Las raíces del árbol del mundo se extenderían hacia abajo en el mundo terrenal, su tronco sería la "tierra media" de la existencia cotidiana, y sus ramas alcanzarían hacia arriba el reino celestial. La seta Amanita Muscaria crece sólo en ciertos tipos de árboles, en su mayoría abetos y árboles de hoja perenne y es el fruto de un gran micelio que se extiende debajo del suelo manifestando una relación simbiótica con las raíces del árbol.

Para los pueblos antiguos, estas setas eran literalmente "el fruto del árbol." La Estrella Polar también era considerada sagrada, ya que todas las otras estrellas del cielo giran en torno a su punto fijo. Ellos asociaban la Estrella Polar con el Árbol del Mundo, y a ambos con el eje central del universo. Según ellos creían la parte superior del Árbol del Mundo tocaba la Estrella Polar, y el espíritu del chamán podía ascender por este árbol metafórico, para llegar de esta manera al reino de los dioses. Este es el verdadero significado de la estrella de la parte superior del árbol de navidad moderno, y también la razón de que el "súper-chamán" Santa Claus tenga su hogar en el Polo Norte.

Los pueblos antiguos se asombraban al ver cómo estas setas mágicas surgían de la tierra sin semillas visibles. A su juicio, éste era un “nacimiento virginal" fruto del rocío de la mañana, que consideraban como el semen de la deidad. El oropel de plata que cuelga del moderno árbol de Navidad representaría este líquido divino.

Los Jugos del Reno
Los ingredientes activos de las setas Amanita Muscaria no pueden metabolizarse en el cuerpo, y por lo tanto permanecen activos en la orina que se excreta. De hecho, es más seguro beber la orina de alguien que ha consumido esas setas, que comerlas directamente, ya que muchos de los compuestos tóxicos son procesados ​​y eliminados la primera vez que pasan a través del cuerpo. Por ello era una práctica común entre los pueblos antiguos reciclar los efectos potentes de la seta bebiendo la propia orina. Los ingredientes de la Amanita pueden permanecer potentes incluso después de haber pasado hasta seis veces por el cuerpo humano.

Los renos eran los animales sagrados de la gente seminómada, ya que les proporcionaban alimentos, vivienda y ropa entre otras necesidades. Cómo a los renos también les gustan las Amanitas, las gentes del Norte cuando los veían saltar haciendo cabriolas, sabían que estaban bajo la influencia de la seta y recogían su orina para consumirla y beneficiarse de sus efectos psicodélicos. Al mismo tiempo, también los renos disfrutaban de la orina de un ser humano que hubiera consumido la seta. De hecho, algunos miembros de la tribu transportaban contenedores de piel de foca donde guardaban su propia orina recolectada, que utilizaban para atraer a los renos perdidos. Los efectos de la seta Amanita suelen incluir sensaciones de distorsión tamaño y de vuelo. La sensación de volar podría ser responsable de las leyendas de los renos voladores de Santa Claus.

Santa Claus, super chaman
Aunque la imagen moderna de Santa Claus fue creada en gran parte por el departamento de publicidad de Coca-Cola; en verdad, su apariencia, ropa, gestos y renos le marcan como la reencarnación de estos antiguos chamanes de setas enteógenas. Uno de los efectos secundarios de su ingesta es que la piel y los rasgos faciales adquieren un resplandor rojizo, razón por la cual Santa siempre se muestra con las mejillas y la nariz de color rojo brillante. Incluso el alegre "Ho, ho, ho!" de Santa Claus sería la risa eufórica de quien ha ingerido el hongo mágico.

Santa Claus viste también como un recolector de setas. Cuando llegaba el momento de salir a cosechar las setas mágicas, los antiguos chamanes se vestían con abrigos rojos y blancos de piel y botas negras altas. Estos pueblos vivían en viviendas hechas de abedul y de piel de reno, llamadas "yurtas", con una chimenea para el humo en el centro que a menudo también se utilizaba como entrada. Después de recoger las setas debajo de los árboles sagrados, los chamanes llenaban sus sacos y regresaban a casa. Subían por la chimenea-entrada, y compartían las setas como regalos para los que estaban dentro. La Amanita necesita ser preparada de un modo especial antes de ser consumida para reducir la toxicidad del hongo y aumentar su potencia enteógena. El chamán guiaba al grupo para preparar las setas y colgarlas alrededor del fuego para secarlas. Estos serían los adornos originarios del Árbol de Navidad.

La chimenea era el portal por donde el espíritu del chamán salía del plano físico. El famoso viaje mágico de Santa Claus, en que su trineo lo llevaba alrededor de todo el planeta en una sola noche, se desarrollaba en la "carroza celestial" utilizada por los dioses de la que Santa Claus y otras figuras chamánicas descienden. El carro de Odín, Thor y hasta el del dios egipcio Osiris es ahora conocido como la Osa Mayor, que gira alrededor de la Estrella Polar cada 24 horas. En diferentes versiones populares el carro era tirado por renos o caballos.

San Nicolás es una figura legendaria que supuestamente vivió durante el siglo IV. Su culto se extendió rápidamente y Nicolás se convirtió en el santo patrón de muchos grupos variados, incluidos los jueces, las casas de empeño, criminales, comerciantes, marineros, panaderos, viajeros, pobres y, también, los niños. La mayoría de los historiadores religiosos coinciden en que San Nicolás nunca fue una persona real, sino la versión cristianizada de dioses paganos anteriores.

Las leyendas de San Nicolás se crearon principalmente a partir de historias del dios teutónico "Hold Nickar". Como las antiguas deidades paganas fueron demonizados por la iglesia cristiana, el nombre de Nickar también llegó a ser asociado con Satanás, conocido como "Old Nick". Las tradiciones locales fueron incorporadas en las nuevas fiestas cristianas para que fueran más aceptables para los nuevos conversos. Para estos primeros cristianos del Norte, San Nicolás se convirtió en una especie de "super-chamán" que les recordaba sus propias prácticas culturales chamánicas. Muchas de las imágenes de San Nicolás de estos primeros tiempos lo muestran vestido de rojo y blanco, o de pie delante de un fondo rojo con manchas blancas, el diseño típico de la seta Amanita. San Nicolás también adoptó algunas de las cualidades de la legendaria "Abuela Befana" de Italia, que llenaba las medias de los niños con regalos. Su santuario de Bari, Italia, se convirtió en un santuario dedicado a San Nicolás.

Al conocer mejor las verdades de estas fiestas populares, podemos comprender mejor el mundo moderno, y nuestro lugar en él. Actualmente muchas personas rechazan la Navidad por ser demasiado comercial, alegando que este ritual en realidad una celebración del materialismo y la codicia. Sin embargo, el verdadero espíritu de este festival invernal reside en la celebración de los regalos de la tierra manifestados en las enseñanzas de la fructificación de una seta mágica que les proporcionaba experiencias reveladoras. En lugar de perpetuar mitos obsoletos y confusos, podría ser más satisfactorio  conocer la fuente original de estas celebraciones estacionales y ampliar nuestra visión de las fiestas de la Tierra.