• Katherine Howe, estudiosa y descendiente de brujas: "Las ahorcaron por tener genio, no por brujas"


Entrevista de Imma Sanchís – La Contra de La Vanguardia - 15/03/2010

Tengo 32 años. Nací en Texas y vivo en Massachusetts. Me licencié en Historia del Arte y Filosofía y me gradué en Estudios Americanos. Estoy casada. En mi país es necesario un sistema sanitario nacional. Crecí con el credo de los puritanos, una rama del protestantismo

¿Cuándo supo que descendía de brujas?
A los 15 años, cuando la hermana de mi padre añadió unos datos inéditos al árbol genealógico familiar.

¿Muchas brujas en la familia?
Muchas, pero me interesaron especialmente dos que sufrieron el terrible juicio de Salem: Elizabeth Proctor y Elizabeth Howe.

¿Qué ha heredado de ellas?
La mayoría de las mujeres acusadas de brujería eran tozudas y de opiniones fuertes.

Cuénteme de aquella vida de mediados del siglo XVII.
Era una época difícil para vivir en Nueva Inglaterra. Una sociedad rígida y altamente jerarquizada donde todo estaba establecido, desde tu estatus social hasta la ropa que vestías yenqué lugar de la iglesia podías sentarte. Las familias eran dirigidas por el patriarca. En ese entorno era muy difícil ser mujer.

¿Cuál era el papel de las curanderas?
Algunas utilizaban la magia, pero a la mayoría de las que ajusticiaron por brujas no se las acusó por lo que hacían sino por cómo eran: pobres e incómodas, porque argumentaban mucho o mostraban mal genio.

¿Quién las acusaba, los vecinos?
En el caso de Salem, las acusaciones partieron de un grupo de chicas adolescentes. La primera que cayó en una crisis de brujería fue la hija, de 9 años, del ministro de la iglesia. Le siguió su prima y la sirvienta de esa casa, de 11 años.

¿Qué significa crisis de brujería?
Lo interesante es que la descripción de los ataques, salvo episodios epilépticos, se parece mucho a la rebeldía adolescente: corrían, reían. Por ejemplo, la sirvienta se levantó durante la misa y le dijo al orador: "Cita el texto que nos vas a explicar", y cuando él se lo dijo, comentó: "¡Oh, qué largo!".

Entiendo, las niñas se desmadraron.
En aquella sociedad, que la sirvienta se atreviera a hacer ese comentario al hombre de más alto rango era algo tan extremo que sólo se podía atribuir a la brujería.

¿Y por qué esa rebeldía surgió en ese preciso momento y lugar?
Salem no fue el único juicio, pero sí el más importante; entre 1692 y 1693, 150 personas fueron encarceladas, 29 fueron condenadas por brujería, de las cuales 19 fueron ahorcadas, un hombre fue aplastado y cinco murieron en la cárcel. Hay varias teorías al respecto. Durante un tiempo se pensó que las adolescentes habían comido un cereal con hongos que les provocó alucinaciones.

¿Descartado?
Sí, parece que ocurrieron varias cosas simultáneamente: había mucha rabia contenida entre las familias, y Salem era la última civilización antes de penetrar en el mundo salvaje. Los ataques de los indios y los franceses eran muy violentos.

Estaban aterrorizados.
Los historiadores afirman que la población de Salem sufría estrés postraumático. La única manera de tratar esa tensión fue a través de un juicio contra la brujería.

¿Esas mujeres ejercían la medicina?
No todas. Las que sí la ejercían eran respetadas, pero no tenían buena reputación, porque si uno tiene el poder de eliminar un mal, también lo tiene para provocarlo.

¿Por qué culparon a esas mujeres, qué relación tenían con las niñas?
Las adolescentes acusaron a mujeres de mediana edad porque estaban socialmente en el momento con mayor poder; tenían un hogar y a su cargo había niños, sirvientes, esclavos y familiares mayores. Y podían solicitar ir a la iglesia, porque no todos tenían permiso. De entre ellas, las pobres, las que no tenían hijos, las que las había abandonado el marido o estaban un poco locas eran las más sospechosas y provocaban miedo.

¿A cuál de los grupos pertenecían sus antepasadas?
Al difícil de tratar. Elizabeth Proctor fue acusada junto a su marido, sobrevivió porque estaba embarazada y aplazaron el juicio hasta el nacimiento del bebé. Cuando nació ya habían terminado. Elizabeth Howe, acusada por su familia política, fue ahorcada con otras 18 mujeres y un par de perros.

¿Perros?
Creían que el animal doméstico era un espíritu. Las brujas tenían la asistencia de serpientes, pájaros amarillos, perros y gatos.

¿Qué es lo que más le ha sorprendido de ese episodio macabro?
Sabía que todas las mujeres quemadas eran inocentes, no esperaba encontrar pruebas de que la gente realmente creía en la magia. Practicaban una forma de religión tan extrema que es difícil imaginar cómo convivía con la magia. Ni siquiera permitían el rito de la Navidad por considerarlo pagano, e iba en contra de la ley brindar a la salud de alguien porque consideraban que si uno estaba enfermo era porque Dios lo había decidido, y desear buena salud era contradecir la voluntad de Dios.

¿Le han quedado ganas de seguir siendo puritana?
Ja, ja. No tengo elección, cada cultura tiene sus elementos extraños del pasado, y podemos aprender mucho mirando la historia.

¿Usted qué ha aprendido?
Lo interesante al respecto de Salem es que hace que nos enfrentemos a ideas erróneas. En Estados Unidos nos gusta pensar que somos muy tolerantes, razonables, y que nos preocupan mucho los individuos débiles de la sociedad, y Salem nos recuerda que no podemos darlo por hecho.